Xov, 05 Nov 2009, 18:26
Asunto: Re: NYC Marathon
Buenas,
Os voy a contar brevemente mi experiencia en Nueva York.
Los dos días anteriores a la maratón me los pasé haciendo turismo por la Gran Manzana, un partido de los Knicks, musical en Broadway, paseo en barco por el Hudson y sobre todo recorrido exhaustivo por el centro de Manhattan, así fue que la noche anterior al maratón tenía la planta de los pies destrozada. Gran error, pero había que aprovechar la ocasión.
El hotel estaba pegado a Central Park y a
un club de running por lo que se veían corredores para aquí y para allá a todas horas. Algo que me llamó mucho la atención fue la cantidad de mujeres corredoras, tanto entrenando como en el maratón, que había en la ciudad. Juraría que había más incluso que hombres.
La mañana del maratón me dirijo al sur de Manhattan para coger el ferry dirección Staten Island donde se daba la salida. Llevaba un itinerario apuntado con líneas de metro y transbordos, sin embargo desde la primera parada ya se unió gente con la misma bolsa transparente y cinta de cronometreje en la zapatilla que yo. Eso simplificó bastante las cosas, ya que sólo tuve que montarme en la ola provocada por esa tremenda marea de gente que me llevó hasta la salida en Ford Wadsworth-Staten Island.
Yo salía en la segunda ola, a las 10:00. Me hidrato bien, me como lo que ofrecen, me saco un par de fotos con unos italianos (cuantísimos italianos había!) y me meto en mi corral de salida. Escuchamos el himno estadounidense - la tercera vez que lo escucho ya en este viaje- oímos el disparo de salida de la primera ola y empezamos a ver miles de cabecitas botando por el puente de Verrazzano. Impresionante.
Nos toca a nosotros, a la segunda ola. Avanzamos hacia el puente, nos vuelven a cantar el himno de USA (4ª vez) y pistoletazo de salida con el New York New York de Sinatra.
Nada más dar los primeros pasos me quito la camiseta que llevaba por encima, craso error, no sabía que en el puente hacía semejante rasca, que frío pasamos madre mía! Comienza entonces lo que sería mi
maratón de Nueva York a.k.a maratón culinaria.
En el primer barrio: Brooklyn nos cruzamos un par de veces con la gente de la segunda ola que salió en el nivel inferior del puente, hasta que nos unimos definitivamente en una calle ancha a la altura del kilómetro 6 aproximadamente. En esa calle empieza el espectáculo, bandas de música en directo, público enfervorecido y muchos carteles del estilo "papi eres mi héroe", "cariño te quiero", "tú puedes Gervasio", "estamos orgullosos de ti Florinda".
En los puntos de hidratación cojo
Gatorade,
agua y
un plátano. Voy chocándole las cinco a todo el que se ofrece y haciendo zig-zags en las rectas para disfrutar de los espectáculos. Saludo a unos
murcianos, unos
valencianos y a algún italiano.
Voy a buen ritmo pero me empiezan a doler ya la planta de los pies. Pienso para mí "non che queda nada" e intento no darle mucha importancia. Sigo disfrutando del recorrido, de la gente y saludo a todo aquel que anima. Me como, asimismo,
un trozo de grana padano,
un par de barritas de chocolate,mmm, e incluso
un trozo de pan todo ello regado con un
gatorade endurance formula bien rico, proporcionado por la organización por supuesto. LLego al medio maratón fresco y contento aunque con dolor de pies agudo.
En Queens empiezo a encorvarme paulatinamente, ya no voy tan fresco. El puente de Queens (km. 25) me pareció interminable, un repecho cansino done los haya, sin el apoyo del público y con el pelotón acusando el cansancio ya. Aprovecho la entrada en Manhattan para comerme
una powerbar,
un par de regalices que repartían las niñas de un colegio y beber
gatorade en cada punto de hidratación. Definitivamente me gusta más que el Aquarius, pienso
Esta parte del recorrido es muy bonita por la cantidad de gente que se junta en los laterales de la calle pero un poco agónico porque la First Avenue son casi 7 kilómetros de recta interminables. Menos mal que me dan
otra powerbar y un
gel sabor fresa-plátano que fue un postre magnífico.
Después de un breve paso por el Bronx (acelero el paso por si las moscas
) volvemos a entrar en Manhattan para enfilar ya Central Park. Los últimos kilómetros se me hacen muy largos y el dolor de pies ya se disipa por piernas, cuello y espalda. No esperaba menos de un maratón.
La llegada preciosa, muy emotiva.
Me como la
manzana y
media bolsa de almendras de la bolsa del corredor, me bebo algo parecido a un
powerade y pienso: no sé si habré adelgazado o engordado en este maratón
Esto es todo amigos. Os animo a disfrutar de esta carrera, sin duda inolvidable. De los españoles con los que hablé ninguno se hubiera anotado en la lotería como yo, todos habían hecho trampas y certificado tiempos inexistentes. Sed espabilaos vosotros también.
Saludos!
Última edición por ivanno o Dom, 09 Mai 2010, 12:33; editado 1 vez