Dom, 26 Nov 2006, 22:15
Asunto:
Tocó madrugón, esto no lo llevo nada bien
, a las 7 am toque de diana, prepararación del desayuno para mí y Mariña y después levantarla, milagro que no protestó nada, hasta me habló!!!, lo que no suele hacer por las mañanas (excepto para llamarme pesada, pelma o similar
). Nos vestimos, recogimos las últimas cosas que siempren se quedan en casa, como la cámara fotográfica y el móvil, (esta vez ya lo dejé en la puerta por si las moscas :D) y a las ocho menos cuarto tiramos hacia Pontevedra, donde nos esperaban
Bugarín,
Andrea y su amigo
Jose, los dos unos fenómenos de la orientación en su categoría.
Por el camino en dirección a Vigo, nos hacen una breve pero suficiente (para lo que es capaz de asimilar mi cerebro a estas horas) descripción del significado de los colores del mapa que nos van a dar y de la simbología que se emplea en ellos. Nos dicen que en Iniciación no necesitaremos la brújula y que, al ser un nivel sencillo, las balizas que tendremos que buscar estarán en sitios fáciles como cruces de caminos.
Llegamos bastante temprano, la carrera comenzaba a las 10, miramos el listado de las inscripciones, no nos encontramos y fuimos a reclamar, debíamos de estar tod@s tont@s porque sí estábamos :oops:, pero a pesar de ello hay que decir que fueron muy amables con nostros . Después de esto y ya con las fichas de control en la mano (que tendremos que picar en cada baliza que encontremos), nos fuimos a tomar un café y continuaron un poco mas las explicaciones sobre el funcionamiento de estas carreras, hubo lugar también para las anecdotas y el chismorreo sobre los participantes en este tipo de pruebas
A falta de unos veinte minutos para el comienzo de la prueba nos acercamos hacia el puesto de control de la salida, hay mucho ambiente, se ve gente de todo tipo, con aspecto de muy profesional y no tanto, incluso hay unos chicos que parece que van a hacer el recorrido en bici.
Bugarín, ve a
Saleta Castro, la fantástica triatleta de Pontevedra, la llama, charlamos con ella y accede, es encantadora, hasta se puso colorada, a sacarse una foto con nosotros
.
Empieza la salida, debo aquí decir que es escalonada, se sale de uno en uno, nos enteramos del tiempo en que salimos cada uno de nosotros, Mariña y yo a los 6 min del comienzo. Cuando nos llaman, me dan el mapa y una ligera decepción, el recorrido que tengo es el 1 y no el 2 como había pedido, me dicen que da igual, que la diferencia entre uno y otro es de una sola baliza (luego me enteraré que además varía el nivel de dificultad de ellas) y se me pasa al momento. Salimos corriendo, y todo el mundo animando (oigo a Andrea y Bugarín) por una zona acordonada para ello, hasta que llegamos a la baliza inicial donde comienza el recorrido. Toca entonces parada y mirar el mapa, todavía sin ojear, tenemos que buscar 10 balizas y primero situarnos, estamos en un cruce de caminos señalizado en el mapa con un triángulo, la primera parece fácil hay que tomar el camino hacia la izquierda y antes de llegar a una pista, que según el mapa parece bastante ancha, encontraremos por la mitad la baliza, nos ponemos a correr, mi hija que estaba muy fresca corría como una fiera (lo malo es que le duró 5 min) y en cuanto nos dimos cuenta encontramos la pista asfaltada, algo falló nos dijimos, teníamos que haber visto la baliza, retrocedemos casi hasta el principio y en el camino seguimos sin ver nada, hasta que me fijo que a la izq del sendero hay gente buscando algo en medio del monte, se me ilumina el cerebro ¡puede que no esté en el camino!, hay que buscar por fuera de él; hecho, en un plis plas estábamos en medio de los helechos, fue fácil, con tanta gente enseguida nos la encontraron...
:lol:, contentísimas sacamos la pinza y picamos nuestras tarjetas. La segunda nos resultó también fácil, lo malo fue la tercera, confundimos el símbolo de un pilón de agua con el de una fuente y estuvimos tres cuartos de hora, junto con otra chica, buscando en el sitio equivocado, sólo salimos de nuestro error cuando apareció por la zona un profe con sus alumnos (un buen grupo de niños de sobre 9, 10 años), nos señaló en el mapa dode nos encontrábamos y alla fuimos de nuevo en busca de la tres. Como el profe controlaba, su grupo se nos adelantó en la tres y la cuatro
, mientras tanto mi hija y yo tuvimos una pequeña discusión sobre el camino a tomar
, que se saldó con un, por mi parte, toma tú el mapa y perdámonos las dos por el monte
(no quiso claro) , la verdad es que en ese momento yo estaba completamente bloqueada, tenía ceguera total para mapas, caminos y puntos cardinales, ella creo que tb
; superado este asunto y detrás del grupo de niños en la baliza cuatro, decidimos que no nos gustaba el rollo de ir detrás de nadie y que teníamos que adelantarlos. Nueva mirada al mapa, la orientación para la cinco era fácil, así que ahora nos lanzamos a correr todo que podía Mariña para separarnos de ellos, lo conseguimos y con más o menos ayuda fuimos localizando las siguientes balizas, aquí decir que la gente es fantástica, todo el mundo te ayuda, te indica, te anima... impresionante. La última prueba la tuvimos en la baliza 10 que nos costó bastantes subidas y bajadas encontrarla, menos mal que ahí encontramos a
Andrea, y entre las tres acabó cayendo
, ultima picada y hasta el puesto de control donde nos enteramos del tiempo: ¡2:2:12!
Qué como lo pasé, fantásticamente. Para mí fue una desconexión total con lo cotidiano, a la vuelta para casa tenía la sensación de venir de otra galaxia y sentimiento de pena porque se hubiese terminado.
Me encantó este deporte, la verdad es que correr no corrí mucho, hay que tener más horas de práctica para ello, pero os puedo asegurar que la combinación de la carrera, con el juego de la búsqueda puede resultar realmente irresistible o por lo menos así me resultó a mí.
Y no sigo porque nunca escribí tanto como hoy, queda alguna cosa pero por ahora basta.
Saludos a tod@s
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