Ven, 20 Abr 2018, 15:50
Asunto: Re: VII Maratón Atlántica Coruña42 (15/04/2018)
Bueno pues después de unos días de descanso otro que se anima a compartir su experiencia:
Segundo maratón tras el del año pasado, en el que lo pasé muy mal para acabar en 4:05 a causa de una lesión en la espalda que me impisió hacer nada las últimas 3 semanas. De hecho llegué a renunciar a participar, aunque al final pude ser de la partida gracias a unas infiltraciones la última semana que me quitaron el dolor. Evidentemente la falta de entreno me puso en mi sitio en la carrera y del 30 en adelante fue un infierno, y los 6 últimos peor que eso.
Este año pude realizar la preparación medianamente bien y tenía decidido salir con el globo de 3:30. De hecho, sin haberlo conocido previamente, estaba deseando que el encargado de dicho globo fuese el mismo que el año pasado, Poulidor, a partir de ahora
Poulidor el Magnífico
Al haberlo pasado tan mal el año pasado las dudas eran grandes y mi espíritu conservador también, así que decidí no arriesgar más y tratar de acabar en ese tiempo o similar ( la semana pasada firmaba acabar en 3:40 seguro ). Como digo el temor a que me pasase lo del año anterior era grande y no quería repetir esa experiencia.
Salí un poco por delante del globo con otro compañero, con la sombra del grupo siempre unos 100 metros por detrás. De todos modos había kms que me salían a 4:45 y otros a 4:57 así que en el km 7 aproximadamente decidí dejarme caer e integrarme en el grupo. Fue la mejor decisión que podía haber tomado. Resguardado y protegido se iba mejor y además animándonos en cada km estaba él, Poulidor el Magnífico. Aconsejándonos en cada avituallamiento, cogiendo aguas de más por si alguien no era capaz de coger la suya, pidiendo ánimos al público y soltando "chascarrillos" para ir rompiendo la monotonía y provocar alguna risa que nos relajase aunque fuesen 150 metros. Salieron temas tan de actualidad como lo bonito que es Oza, el difunto Andresín del que tanto se ha hablado, de la rivalidad con los vecinos sureños en lo futbolístico y hasta tuvimos tiempo para rebasar a dos "espontáneos" del 10k que se equivocaron y completaban su primer paso por Oza sin saber mucho qué pasaba
Fueron pasando los kms y en el25 vino el primer momento de tensión: tras el avituallamiento de Oza no aguantaba más y tuve que parar a evacuar líquidos. Evidentemente ese minuto de parada hizo que el grupo se me fuera y tuve que decidir entre subir el ritmo de manera notable y alcanzarlo en poco tiempo o ir tratando de limarle metro a metro pero sin exigirme demasiado ya que sabía que cada gramo de fuerza me iba a hacer falta después. Decidí hacer los segundo y, aunque cada vez los veía más cerca, esos 100 metros parecían un km y no era capaz de conectar. Lo hice casi 4 kms después, al entrar al paseo a la altura del instituto Eusebio da Guarda. Me situé al final del grupo y traté de recuperrar, cosa que hice y agradecí. en aquel momento solamente quedaban 15 o 20 corredores ya que bastantes se habían ido quedando atrás.
Llegó el 30 y el show del "Magnífico" continuaba: a partir de ese km su "¿sabéis que veo? El km 30!!!!! 31!!!!!!!!32!!!!!!! Y así hasta el final en cada 1000 metros que completábamos. Ya casi no hablábamos ninguno pero Poulidor seguía animándonos. En el 35 estaba la familia animando una vez más con los enanos dándole a la bocina sin parar. Cada vez que los veía me animaba a seguir y ese paso iba a ser el último hasta verlos de nuevo, ya en María Pita así que había que resistir como fuera porque ellos también habían hecho un maratón particular moviéndose de un sitio a otro para animarnos unas 10 veces a lo largo del recorrido. Al final de Juana de Vega Poulidor empieza a gritar a la gente que estaba en la plaza de Mina "sí se puede, sí se puede...!!!!!" y todo el mundo lo sigue y nos anima. Las pocas fuerzas que quedaban parece que crecen por un momento y se pone la piel de gallina viendo que gente que no conoces de nada te apoya como si fueras parte de su vida. Increíble y emocionante.
A partir de ahí vino el bajón. Aguanté con el grupo muy reducido hasta la entrada en Oza en el que se me fue definitivamente. Ya solamente quedaban Poulidor y 4 más pero evidentemente tenían que seguir. Me entraron las dudas porque no podía más pero preferí marcarme un ritmo que me mantuviese en movimiento a cebarme y seguir con ellos 500 metros y hundirme después. Lo conseguí, hasta salir de Oza pasé de ir de 5m/km a ir a 5:20m/km, pero constante. El ir pasando gente también me animaba. Sabía que iba mal pero nada que ver con el año pasado en el que en este punto las piernas iban totalmente contracturadas y el isquio estaba a punto de romper. Iba justo pero era un tema de fuerzas.
Al salir de Oza vi a Lihto, al que nunca me he acercado a saludarlo por no interrumpir, ya que casi siempre está hablando con otros corredores y no me parece el momento oportuno para presentarme. Algún día cercano seguro que te pillo solo jaja ( qué mal ha sonado esto
). Quedaban 2 kms y sabía que a partir de la Plaza de Orense estaba la animación. Costó llegar a ella pero una vez allí toda esa gente animando de nuevo te hace ir solo. Vas muerto, no puedes más pero no puedes pararte porque sabes que no queda nada y además se merecen que sigas corriendo por darte esos ánimos. Miguel, Jose, los de los cencerros...tanta gente gritando. Paso el edificio de correos y aunque me van pasando otros corredores sé que ya estám, que quedan poco más de 2 minutos de sufrimiento y que al entrar en María Pita va a estar mi peña de hooligans otra vez con las bocinas. Trato de no pensar y llegamos a la curva donde los veo y me vuelvo a emocionar. Queda entrar en la plaza y disfrutar de esos últimos 50 metros que te llevan a la ansiada y esperada meta para terminar en 3:31:29.
Al llegar los primero que veo nada más cruzar la meta es a Poulidor el Magnífico al que me acerco a saludar y darle las gracias. De paso me enchufan un micro para preguntarme qué le estaba diciendo a la liebre y creo que contesto correctamente pero estoy tan cansado que no me salen ni las palabras. Después lo siguiente que veo son las sillas y allí me "aparco" unos minutos a disfrutar de un merecido descanso.
Quiero nuevamente y ya en frío reiterar mi agradecimiento a todo el mundo: voluntarios, seguridad , corredores, público que aunque no sea mucho es ANIMOSO y ENTREGADO a tope y por supuesto a mi familia que ha aguantado mis salidas a horas intempestivas, mis planes de entrenamiento, mis nervios... GRACIAS a todos.
Y las últimas líneas no podían ser para otro que no fuese para nuestra liebre. MUCHAS GRACIAS A POULIDOR. Como te dije en la meta, sin tu ayuda esa marca sería muy difícil de conseguir para mí. Es cierto que nosotros le damos a las piernas, pero tus ánimos, consejos, motivación, sentido del humor y empuje nos ayudó mucho, al menos a mí. Y no sabes cuánto te lo agradezco. Y todo esto corriendo igual que nosotros un maratón, que muchas veces la gente no lo tiene en cuenta. Tener ese apoyo en una carrera tan larga en la que la monotonía puede "comerte" es primordial. A partir de ahora compartiré carreras con otras liebres pero Poulidor solamente hay uno
Y hasta aquí llega la C42 de este año. No he escrito, pero he seguido el hilo constantemente y ya da "nosequé" que toque a su fin pero bueno, es lo normal.
Un saludo para todos, y enhorabuena a cada un@ de los que lo han intentado, lo hayan conseguido o no.
Última edición por Quiquevich o Lun, 23 Abr 2018, 21:37; editado 3 veces