Ven, 28 Set 2018, 22:11
Asunto: Re: El Diario Peregrino de Larpeiro
44. EL GARGAJO DE LA DISCORDIA
Sigo corriendo, sin novedad. Este mes, menos kms, voy sobre 100, muchos menos que en Agosto. Ayer me pasó algo curioso...
Cavilaba mientras me duchaba post carrera (ese momento es casi mejor que el mítico cigarrillo post coit...) que en nuestro idioma ser y estar son verbos (obviamente) diferentes mientras que en otros idiomas no es así: el ejemplo más tangible es el inglés. Con el francés creo que sucedía otro tanto, aunque me acuerdo de aquellas clases en el instituto como de un c uento de ciencia ficción, parafraseando a MClan.
¿Por qué, oh Larpeiro, aburrido entre los (diarios) aburridos?
Pues porque tenía un día rápido,
estaba siendo rápido (para mí) a pesar de no
ser rápido. Pero entre fartlek y fartlek (en ruta) adelanté a un tipo que no se lo tomó muy bien. Decidió convertirse, en mi sombra,
ser mi sombra pero no
estar a ella. No es que el señor
fuera tonto pero ese día en concreto,
estabatonto.
Acabo el fartlek y me tomo dos minutos al trote para recuperar. Ni veinte segundos después me pasa el tipo...y escupe de malos modos (no hacia mí, claro, pero creedme el desprecio
erapatente y
estaba implícito.
Como ya peina uno canas, pues paso del tema mientras el tipo se aleja brioso.
Trotando, por cansancio prolongo mi pausa hasta cuatro minutos en los que, cometiendo la buena acción del día, recojo el bastón que se le ha caído a una señora, que sonriente me da las gracias.
Y a por el último fartlek, corre que te corre, adivinad qué aparece en un recodo del Camino...el esputador brioso. Y va un ritmo lamentable. En fin, solo se escuchan algunos pájaros, el viento meciendo las copas de los árboles y unas señoras charlando pero a mí me suena a los acordes de Rocky.
Lo paso, sin escupir porque
soy bueno, pero no lo
estoy
Esta patética narración debería acabar aquí, pero no. Porque empiezan a resonar pasos detrás. Tiene que ser el esputador. Pero no voy a girar el cuello para comprobarlo. Eso sería algo así como reconocer su existencia como ser humano... así que aprieto el paso: al carajo con el ritmo, el entreno y las canas.
El tipo viene detrás, subo el ritmo y me pongo (luego lo vería en el gps) a 4:15 de media en ese km, coqueteando con mi límite y la pájara. Por orgullo estúpido, sigo, dispuesto a no ceder. Cuando ya lo daba todo por perdido, escucho un gemido. Bueno, una exhalación que suena como un gemido. Aprovechando una curva del Camino, miro (sin que se note mucho) y veo al esputador, rojo como la grana y llevándose la mano al bajo vientre. Se ve obligado a parar con lo que parece un flato de manual.
-Escupe, que se pasa antes -le espeto en una suerte de esputo sin gargajo.
Y por una vez, una "victoria".
Recordad, el que espeta el último, esputa mejor.
Saludos a tod@s