Mér, 08 Ago 2018, 15:39
Asunto: Re: Diario de Freaky (Triatleta insolvente)
"La vida de Pi", anteayer la pasaron por telecinco. Un poco truño. Me imaginé la película de marras, sin los efectos digitales, en otro escenario menos exótico, en vez de tigres bichos de la humedad, así en plan película española de los ochenta, ridícula. El resultado fue el entreno de esta mañana. Un entreno ecológico, bioresponsable corporativo, y por supuesto prevencionista.
Ascenso por Uxes, el 21 pasa cerca, no lo suficiente. Subo por la carretera hacia Arteixo, al llegar a la glorieta que lleva a Feans tiro para arriba, y ya es el cuarto camión volquete que me pasa cerca, no lo suficiente. En el kilómetro 4 me acuerdo de Pi y sus aventuras cuando encuentro un zorro recién espichado, podría decir despachado por un camión. Impresionante el animal por su tamaño. Se me corta el punto a base de bien, cierta tristeza, y me paro para observarlo un rato, no sé, cierto momento de respeto hacia semejante bicho que parece mentira que viva por allí. Acumulo un minuto de retraso con respecto a lo habitual. Sigo.
El resto del entreno hacia Oblivion lo paso rezando por el bicho. No hay ironía en mis palabras. Que putada.
En Oblivion está el del bastón y el que no tiene bastón. Le están dando recomendaciones a una pareja hetero de MMB (Mountain Bike Millenials) que les preguntan sobre sendas de montaña. Han aparcado su coche pegado al campo da chave y no parece sentarles muy bien a los viejos pues contestan con monosílabos. Las criaturas están montando las hiperbicis que llevaban en el coche y los viejales no acaban de entender la cosa. Me preguntan, y les digo que yo soy de carretera, no puedo añadir más y tiro hacia abajo, hacia Celas. Soy racista de carretera.
Asciendo hacia Xalo. Mi pretensión es llevar plato medio pero no puedo con el culo. Bajo a plato pequeño en un ascenso a ritmo de unos 10 minutos. Al llegar arriba coincido con dos puriles. Yo soy puril-forty, estos son puriles-sixty. Y empiezo el descenso y llegada a Coruña en una especie de pique sin sentido con estos puriles. Mis músculos no me lo recomiendan, pero no hay mejor entreno que el que vale para recordarle a los viejales lo muy acabados que están. Les mantengo el ritmo a duras penas y el repaso final me lo dan ellos en las Jubias: me consuelo con que son dos, que tienen más experiencia, que gastan una Bianchi de 3000 pavos cada uno frente a mi cutre Haibike de 700 de rebaja. Al final sólo me sacaron un par de minutos gracias a un semáforo. Acabados.
Sesión de refuerzo, distensión rodillo y estiramiento viendo la peli de "Axterix en Bretaña", mil veces mejor que la "Vida de Pi" y sus metáforas dentro de las cuales me incluyo en forma de porco celta.
49 km a 2:28, 815 m de desnivel, sin pinchazos, y sólo un muerto en la carretera.
No es mal censo.